A lo largo de unos 10 minutitos de post pasamos a comentarte cuál es nuestra opinión a este respecto, te prometemos que, al final, tendrás una idea clara de si este tipo de estrategia es apta para tu producto o servicio, o no lo es.
Escoge al influencer adecuado… o pierde tu dinero.
Lo importante al empezar a pensar en una estrategia de influencers es que tienes que buscar al influencer adecuado para tu producto o servicio. Sí, sabemos que esto es de perogrullo, pero muchas veces no se aplica.
Por el tamaño de su audiencia.
El tamaño de su audiencia tiene que ser acorde al tuyo. Básicamente por el precio. Si pretendes que Paula Etchevarría (con millones de seguidores) hable acerca de tu crema antiarrugas no te va a salir barato. Si cuentas con un presupuesto millonario, te recomendamos que lo hagas, pero si no es así, estarías destinando demasiado presupuesto a una sola acción, lo cual nunca es recomendable.
Pretender anunciarte con un Influencer de gran audiencia teniendo un producto de calado pequeño, es igual de absurdo que anunciarte en el Prime Time de Telecinco. Se llevaría todo tu presupuesto para una sola acción; teniendo en cuenta que cualquier acción de publicidad en internet o tradicional tiene que ser repetida en el tiempo y que deberías de contactar con varios influencers.
Teniendo en cuenta su temática.
Los influencers generalistas suelen tener menos endgagement en sus colaboraciones. Algo que no te suele importar demasiado si de nuevo tienes un amplio presupuesto (pues al final estás haciendo branding), pero si tienes un presupuesto medio, tienes que pensar en los influencers de nicho, para esto es importante que conozcas tu buyer persona.
Si vendes una nueva crema hidratante específica para rizos, tendrás mucho más volumen de compras a través de una youtuber que se dedica a hablar sobre cómo tratar el pelo rizado que si decides hacerlo con una estrella de Instagram que habla de su estilo de vida en general.
Una estrategia para la que hay que esperar a ver resultados.
Cuando estamos realizando marketing de influencers tenemos que pensar que no estamos ante una estrategia de rápida efectividad. Cuando hablamos con un influencer para que recomiende nuestra marca atacamos el branding inicial de nuestro producto (hacemos que nos conozca determinada audiencia), y sobre todo atacamos a aquéllas personas que ya nos conocen pero estén buscando una opinión de valor para terminar de convencerse a realizar la compra.
Si no hemos planteado ninguna estrategia para lo que ocurre durante el resto del tiempo (que es mucho, aunque no lo parezca), no encontraremos más que frustración.
Además, este tipo de estrategia no puede ser «flor de un día». Ha de estar sostenida durante un tiempo, cuanto más mejor, para que tenga efecto real. No creas que por que un día hablen de ti vas a conseguir nada, cuando esta estrategia funciona mejor es cuando un influencer se une a una marca, le ayuda a generar contenido y acciones a medio – largo plazo y liga de alguna forma su nombre a la marca.
Indispensable combinarla con otras.
Hoy en día son pocas las empresas que meten «todos los huevos en el mismo cesto» cuando están planteando su estrategia publicitaria y su consultoria de marketing; pero es que precisamente en el marketing de influencers estarías prácticamente tirando el dinero si no lo haces.
Piensa que en el momento en el que tu posible comprador está escuchando un consejo acerca de tu producto ni siquiera se ha planteado comprarte, no te necesita (a no ser que te hayas encargado de que aparezca ahí cuando está a punto de comprar).
Por ello es básico que haya tráfico de pago mediante Google Ads u otro tipo de publicidad online que trate de re captar a aquéllos que te vieron en un vídeo y que sintieron curiosidad por ti.
Busca acciones más creativas.
No son pocas las veces que una empresa contacta con un influencer y la campaña que se les ocurre de forma conjunta es de lo más básico. Este tipo de estrategias son perfectas si se combinan con eventos divertidos.
Aunque sólo busques una recomendación o simplemente un concurso, trata de pensar que el hecho de que te lances a este tipo de estrategias exige un extra de creatividad; ya sea por parte de tu equipo de marketing o de tu propia estrategia de influencers. Muchas veces, puede que sea el propio inflluencer quien te proponga algo diferente o divertido, lo que sí es importante, es que no te quedes en los básicos o nadie se acabará de acordar de ti.